Las tormentas de verano, la meteorología invernal… Durante todo el año, la lluvia nos puede sorprender en la carretera, y hay que conducir bajo la lluvia de una cierta manera para no correr riesgos. Pero tu principal garantía es el estado de los neumáticos.

Por Publicado en: junio 17, 2021Categorías: Conducción952 palabras4.8 min para leer
Conducir bajo la lluvia: unos neumáticos en buen estado garantizan tu seguridad
© Pixabay / jwvein 

Salvo para trayectos largos, no se suele consultar la meteorología antes de coger el coche. Por eso, rezulteo va a compartir contigo algunos consejos y automatismos para cuando caiga un aguacero repentino: conducir bajo la lluvia es algo que se aprende. Vas a saberlo todo para mantener la seguridad en un suelo mojado, desde el equipamiento de los neumáticos hasta la manera de conducir.

Conducir bajo la lluvia: cómo equipar bien el coche

Para conducir bajo la lluvia, el vehículo tiene que garantizar tu seguridad y tiene que asegurarte que el trayecto sea tranquilo. Pero para eso tienes que comprobar regularmente el estado de tu coche:

  • comprueba que el limpiaparabrisas trasero y el delantero están en buen estado
  • comprueba el nivel de desgaste de los neumáticos: la profundidad mínima legal del dibujo debe ser de 1,6 mm. Por seguridad, usa como límite 3 mm para los neumáticos de verano y cuatro estaciones, y 4 mm para los neumáticos de invierno. Los dibujos profundos evacúan más agua y previenen un posible aquaplaning. Y también puedes simplemente vigilar los testigos de desgaste  
  • comprueba el estado de los neumáticos: el desgaste debe ser uniforme en los surcos, que no tienen que estar deformados
  • comprueba que la presión de los neumáticos sea la adecuada: un neumático que no está lo suficientemente inflado favorece una mala adherencia y el riesgo de aquaplaning.
  • comprueba que las luces del coche funcionen bien

Adapta la velocidad para conducir bajo la lluvia

Cuando llueve, el riesgo de accidente se multiplica por dos. Entonces, tienes que tomar todas las precauciones posibles al coger el coche. ¿Cómo tienes que conducir bajo la lluvia para no correr peligro?

En cuanto a la velocidad, tienes que reducirla inmediatamente y tienes que dejar más distancia con el vehículo que está delante, porque con el mal tiempo hay muchos frenazos bruscos. E incluso con unos buenos neumáticos, la distancia de parada de tu automóvil será más larga en una calzada mojada que en una seca. Por tanto, no frenes en el último momento e intenta anticiparte.  

Consejo de experto: deja una distancia equivalente a 4 segundos de trayecto entre tu vehículo y el que tienes delante.

Con lluvia intensa, cuando la visibilidad es mala, el conductor tiene que adaptar su velocidad, que está limitada a 50 km/h en toda la red viaria. No aceleres bruscamente.

Cuando te acerques a una curva, frena despacio en la línea recta antes de que la carretera gire. Eso impedirá que se produzca un sub-viraje, es decir, que el neumático delantero pierda tracción primero. En curva, mantén la velocidad de manera moderada

Tienes que estar concentrado y mantener el control en la carretera sujetando el volante con las dos manos. En una carretera anegada, te cruzarás con camiones y otros vehículos que circulan más rápido y que te van a lanzar agua, lo que va a reducir temporalmente tu visibilidad. Si pasas junto a peatones o ciclistas, reduce la velocidad cuando te aproximes a los charcos de agua.  

Nota: ¿tienes la impresión de que el coche resbala? En caso de aquaplaning, levanta el pie del acelerador, ¡pero no frenes! Es posible que a los neumáticos les falte adherencia y se conviertan en una pista de patinaje. Cuando sientas que pierdes el control, levanta el pie del acelerador y usa el freno motor hasta volver a recuperar la adherencia de las ruedas.   

Cuando hay mal tiempo, lo que hay que hacer es anticiparse para prevenir los peligros de la carretera. Como en la conducción sobre nieve o hielo, tienes que evitar los gestos bruscos al volante para conducir bajo la lluvia.  

En caso de pérdida de adherencia, lo mejor es reducir la velocidad para encontrar un mejor contacto con el asfalto. Además, los neumáticos mantendrán un mejor contacto con la carretera y una mejor motricidad a una velocidad reducida.

Nota: Observa las huellas que dejan los otros vehículos. Si son estrechas, eso quiere decir que no se ha evacuado suficiente agua de la calzada y, por tanto, hay que reducir más la velocidad.

Automatismos útiles para conducir bajo la lluvia

En cuanto empieza a caer la lluvia, lo primero que tienes que hacer es comprobar que el coche tiene las luces de cruce encendidas. Como dice el Código de Circulación, ¡hay que ver bien la carretera, pero también te tienen que ver bien! Pero no enciendas las luces de niebla porque van a deslumbrar a los demás conductores.

Antes de que se forme vaho en las ventanillas y en el parabrisas, acuérdate de encender la ventilación o el aire acondicionado. El aguacero ya reduce la visibilidad, por tanto, es mejor no sufrir además el fenómeno de la condensación.  

La lluvia provoca un mayor número de averías mecánicas en los vehículos: la humedad puede dañar los motores y los circuitos eléctricos. Si tu coche tiene una avería, está contraindicado abrir el capó para no causar más daños.  

¿Estás atravesando aguas profundas (inundaciones, crecidas de ríos…) y el coche se ha calado? Sobre todo, no vuelvas a arrancar porque puedes agravar la avería del vehículo.

En resumen, ¿qué hay que hacer para conducir bajo la lluvia sin correr peligro? Hay que:

  • detenerse para esperar a que termine el chaparrón
  • encender la calefacción y desempañar las ventanillas
  • encender las luces de cruce
  • reducir la velocidad   
  • espaciar las distancias entre los vehículos

¡Comparte este artículo donde quieras!

Artículos que te pueden interesar:

  • Leer el artículo
  • Leer el artículo
  • Leer el artículo
  • Leer el artículo